Instantaneamente, luego de unos pocos segundos de gloria, viene lo peor. Esa caída estrepitosa, rápida, que no te deja disfrutar de lo mucho que te costó llegar a la cima.
Todos los días me siento así. Odio sentirme así, ¿por que no todos seríamos comos piedras?, la vida sería tan fácil de esa manera. No habría sufrimiento, ni enamoramientos, ni nada que complicase mi existencia.
Me dijieron que expongo mis sentimientos como un vendedor expone su mercadería, así sin más. Pero yo no soy así, soy la persona más reservada del grupo respecto a mis sentimientos. No los quiero exponer, por que siempre los terminan maltratando, juegan con ellos como si fuesen autitos.
En fin, necesitaba escribir esto. Tengo muchas cosas más para escribir pero se me hace tarde.
Hugs for everyone!
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